CROQUETA Y EMPANADILLA, Ana Oncina (La Cúpula, 2014)

  Con sólo leer el título y ver su portada, el/la lector/a puede pensar que “Croqueta y Empanadilla” es un cómic dirigido a un público infantil. Sin embargo, el/la lector/a que tenga este pensamiento no estará del todo equivocado/a, pero tampoco estará en lo cierto.

  En el cómic, la autora Ana Oncina plasma vivencias cotidianas de su vida en pareja, por lo que en mi opinión no está dirigido a un público adolescente, sino a un público adulto que pueda empatizar con las situaciones diarias de cualquier pareja, sólo que trata los temas con mucho humor. Son situaciones habituales que la mayoría de veces nos hacen resoplar y que la autora consigue darles un giro y sacar lo positivo de ellas. 

  En mi caso, es cierto que conforme iba pasando las páginas me han sacado una sonrisilla y un pensamiento de: “no soy la única”. Por ello, si lo que pretendes es pasar un rato distraído/a de tus problemas diarios, debes leerlo.

  Por si su título Coqueta y Empanadilla fuese poco atrayente, espera a conocer los personajes. Como no podía ser de otro modo, estos personajes son tan apetecibles como el nombre al que hacen mención. En una palabra, diría que son entrañables.

  Esto, unido al breve texto en los bocadillos de cada viñeta, agiliza su lectura, y permite prestar más atención a los detalles de las ilustraciones. Es un cómic bicolor, en el que predominan los colores blanco y salmón. Es en las imágenes donde la autora destaca por su habilidad para la ilustración.

  En definitiva, lo recomiendo a quienes quieran pasar un rato entretenido riéndose de las pequeñas cosas que componen la vida de cualquier ser, y especialmente, a quienes no les guste leer pero sean conscientes de su importancia. Es un buen cómic para iniciarse. 

María